Para bien o para mal el cine suele ser un reflejo de su tiempo y es evidente que las drogas son algo muy presente en la sociedad actual. 'Trainspotting', 'Blow', 'Pulp Fiction' con su Vincent Vega... No es muy difícil rememorar una y mil escenas en una y mil películas, con todo tipo de actores, en las que sus personajes aparecen consumiendo drogas. Y si hay una droga reina frente a la cámara esa es la cocaína.

Hay películas, y sobre todo personajes, que no se entenderían sin la adicción a dicha droga. Sería muy difícil comprender las motivaciones de Al Pacino en 'Scarface' sin entender su adicción, o a Leonardo DiCaprio y su equipo en 'El lobo de Wall Street'. La ya mencionada 'Pulp Fiction' perdería gran peso argumental sin la adicción de Mia Wallace, o no sería comprensible el trágico final de Johnny Depp en Blow sin lo que dicha sustancia conlleva.

La gran mayoría de actores y actrices en Hollywood, de una forma u otra, han tenido relación (cinematográficamente hablando) con dicha droga, una de las sustancias más adictivas y destructivas del mundo. Y como es lógico, lo que vemos en la pantalla poco o nada tiene que ver con la cocaína. Pero entonces, ¿qué es lo que los actores 'esnifan' en las películas?

Durante la década de los 80, el sucedáneo más utilizado en las películas eran la leche en polvo y el bicarbonato sódico. Pero la consistencia no se asemejaba del todo a la buscada. Según un reportaje de Independent, en la actualidad es un polvo llamado inositol lo que se suele utilizar en las películas.

El inositol se trata de un polvo sintetizado a partir de vitamina B, que es la misma utilizada en las bebidas energéticas. Al tratarse de una vitamina, puede tener 'cierto efecto de euforia' en el individuo, nada comparable con la droga por supuesto.

Sin embargo no deja de ser irónico que para evitar el consumo de drogas, los actores acaben inhalando una sustancia que tiene los mismos efectos que la cocaína pero a pequeña escala. Algo así como una 'cocaína light'. Esto llegó a ser un problema en la película 'El Luchador', en la que Mickey Rourke desarrolló algunos problemas de ansiedad tras consumir la sustancia.

El hecho de que 'las cosas no sean lo que parecen' no implica que los sucedáneos utilizados no sean a su vez nocivos para el organismo. Al Pacino aseguró que, bastantes años después de interpretar a Tony Montana aún seguía notando dañadas sus fosas nasales. Al fin y al cabo, aunque la sustancia consumida no les llevará a la muerte, los actores están introduciendo polvo a través de sus fosas nasales. Algo altamente nocivo para el organismo, sea real o no la droga ingerida.