Verano es sinónimo de festivales. Desde que da comienzo la estación más calurosa del año, diferentes ciudades y pueblos de toda España se preparan para acoger a cientos de jóvenes que llegan para disfrutar del ambiente y la música. Pero, ¿estás tú preparado para pasar una semana fuera de casa durmiendo en un camping? Si este año vas a ser un 'sounder' y sobre todo, si es tu primera vez, hay algunas recomendaciones que pueden serte de mucha utilidad.

Qué llevar

Esta probablemente sea la mayor duda que te surja durante los días previos al festival: qué llevar, dónde llevarlo... Lo primordial: la tienda de campaña y un colchón hinchable -o esterilla en su defecto- para poder dormir. Sin embargo, con esto no basta, si quieres estar a gusto en el camping necesitas algunos extras que harán tu estancia más agradable: sillas de playa y una mesa, sobre todo si no quieres comer en el suelo. Vista la experiencia climatológica de la edición del 2015

Vista la experiencia climatológica de la edición del 2015, no sería una mala idea coger un paraguas o un chubasquero de casa, aunque si se repiten los aguaceros del año pasado, de poco te van a servir. Piensa que la prioridad no es la ropa, no es un desfile de moda, si no la comodidad y no pasar hambre. Así que olvidate de maletas porque ocupan mucho espacio en el coche y quitan sitio a los objetos verdaderamente importantes. Con una mochila basta. Son muchos días, sí, pero con una camiseta por día y un par de pantalones, sobra. Para no cargarla en exceso y que no reviente, con unas chanclas y unas zapatillas (las más cómodas que tengas), es suficiente.

Las neveras, fundamentales para la comida

Para no pasarlo mal lo mejor es llevar neveras de sobra para poder guardar la comida dentro y que se conserve en mejor estado. Fuera hace mucho calor, déjala siempre en la sombra y que no se te olvide llenarla de placas frías de hielo, no de bolsas, porque se derriten en seguida y se te empapará todo de agua.

Si el objetivo es pasar un festival bueno, bonito, pero sobre todo, barato, se sobrevive a base de latas de conserva, fiambre, pan de sándwich y fuet. Nada de lujos. Para algún capricho tenemos lo que se pueda conseguir en los supermercados más cercanos. Hemos de tener en cuenta que cerca del recinto Arenal Sound hay dos supermercados y que durante la semana que dura el festival conseguir comida, bebida, hielo, alcohol... se vuelve complicado, todo el mundo quiere comprar algo. Dentro del pueblo de Burriana ya hay más establecimientos pero están bastante más lejos, habría que coger bus o pegarse una buena caminata hasta ellos, aun así, no esperéis tener el súper igual de lleno que lo está en vuestro barrio. Ten en cuenta que Burriana tiene un censo de población de apenas 35.000 habitantes (2014) durante el año y el Arenal Sound 2015 reunió a 260.000 personas durante toda la semana. No hay comida para tanta gente, ¡importante!

Dentro del recinto Arenal Sound existen puestos de comida con bastante variedad -y de bastante calidad- para ser un festival: pizzas, macarrones, hamburguesas, paellas, arroces, patatas fritas... No es que sea muy barata, todo hay que decirlo. Pero el último día del festival rebajan su precio, necesitan deshacerse de todo, tras acabar el Arenal marchan directo a otros festivales.

Otro dato importante es que está prohibido hacer fuego, no se puede cocinar nada, todo ha de ser preparado de casa, además, piensa que no hay electricidad y que si el tiempo acompaña (pensando que es la primera semana de agosto en Castellón) la comida fuera de la nevera se hace mala en ese mismo día.

Un buen truco para comer y cenar algo decente el primer y segundo día es llevarse varios tuppers hechos de casa.

A la hora de comprar, lo más cómodo es hacer una lista de la compra común con tus amigos. Quedar, hablar y comprar todo entre todos. La comida se hace mala muy rápido, mejor compartir todo y si se apura la comida en el momento, mejor. Si toca comer sandwich, todos pan de sandwich, que al día siguiente estará para tirar. Compartir es vivir.

La bebida no alcohólica, tu mejor aliada

Mucha gente piensa que cuando va a un festival es para estar las 24 horas del día borracho. No os engañéis, los días se hacen muy largos y hay tiempo para todo. Una cerveza fresquita siempre apetece pero es muy importante llevarse mucha bebida no alcohólica: zumos, batidos, gazpachos y mucha, mucha agua. El cuerpo necesitará un respiro y refrescarse, recuerda que el alcohol no es un buen aliado para esto y que de buena mañana para acabar con la resaca un zumo o batido fresquito te va a ser de mucha ayuda.

Es importante recalcar que la organización no permite el paso de vidrio dentro del recinto de acampada. Si ya has comprado tu bebida lo mejor es que la pases a botellas de plástico antes de salir de casa. Aunque es cierto que mucha gente cuela el alcohol en su botella original, en la entrada de los campings hay seguratas que se encargan de registrar a todo aquel que pasa. Si te pillan con el alcohol te lo retienen hasta que puedas cambiarlo a una botella de plástico. No te resistas, que te lo vaciarán.

Recuerda que a los conciertos no puedes pasar bebida bajo ningún concepto. Se realizan varios registros antes de acceder al recinto -te van a registrar desde la cartera hasta el paquete de tabaco- y es prácticamente imposible colar algo. No vais a pasar sed, en cada escenario hay servicio de barra y espacios de comida.

El camping: ambiente y sofoco a partes iguales

Aquí hay diversas opciones: hoteles dentro del pueblo, hostales, cámpings de localidades cercanas... pero, ya que vas de festival lo ideal es dormir en uno de los cámpings oficiales. Es aquí donde más ambiente hay y donde más gente vas a conocer. Eso sí, no creas que vas a dormir bien y cómodo, todo lo contrario: se duerme en tiendas de campaña, con colchones hinchables (o esterilla en su defecto). Además, los conciertos son por las noches y acaban muy tarde, probablemente más de una jornada te acuestes con los primeros rayos de sol saliendo.

Eso es lo peor, en apenas unas horas el sol pegará con fuerza y te despertarás por el calor que hace dentro de las tiendas. Entonces, ¿dónde duermes?, lo más cómodo es salir de la tienda -bajará unos grados la temperatura- y te acomodas como puedas en la silla de la playa. También puedes buscar sombra y probar suerte. Ten cuidado no te despiertes el último, si tus amigos ya se han despertado, te habrás quedado sin un buen sitio para dormir. Si no puedes dormir de día no te estreses, a media tarde el tiempo da un respiro, siempre es buen momento para echarte una siesta y coger fuerzas para la noche. También existe la posibilidad de que a media tarde hagan conciertos cerca de donde has acampado y la siesta se complique un poco, pero el cuerpo es sabio, al final caerás.

Higiene: el debate de pagar o no

Respecto a la higiene personal, hay opción de acceder a las instalaciones puestas gratuitamente o a las de pago. Si quieres un festival low cost, usa las gratuitas. Eso sí, no te esperes una gran infraestructura. Las duchas son mixtas, sin separación, y sin posibilidad de regular la temperatura. El agua sale, literalmente, congelada. Pero tranquilos, con el calor que hace -o debe hacer- lo agradeceréis.

Respecto a los aseos, igual que las duchas, pueden ser de pago o gratuitos. Los gratuitos dan bastante pena y sus condiciones están muy lejos de ser higiénicas ¡no te olvides de llevarte el papel al baño, lo más seguro es que no haya!

Si prefieres estar más cómodo, los de pago cuestan un euro por uso. Cuentas con una cabina privada con pestillo y papel higiénico además de una pila para asearte. Estás de festival, sí, pero ir al baño a gusto es algo innegociable.

El drama del dinero, ¿cuánto hay que llevar?

Llévate dinero de más, pero tampoco una gran cantidad, piensa que apenas vas a gastar dinero más allá de lo que puedas comprar en comida y/o bebida. No vas a traerte de vuelta souvenirs. Eso sí, nunca sabes qué puede pasarte y qué vas a necesitar en alguna situación de emergencia. Te vendrá bien para comprar comida caliente y bebida fría de los diferentes stands que se montan. Además, si eres un adicto al móvil y no puedes desengancharte de él ni yendo de festival los campings tienen un puesto de recarga y servicio de prestación de cargadores. Las casas que están alrededor y los puestos de comida que hay desde el camping hasta la zona de conciertos también cargan los móviles. Eso sí, has de tener confianza en la persona a la que se lo dejas, tú le das el móvil para que te lo cargue y en unas horas vuelves a por él. Aquí te darán el móvil con la carga al 100 %, los stands que están dentro del camping no cargan el móvil ni a la mitad, ellos te darán una batería portátil, así que depende de cuánto consuma tu móvil, se cargará más o menos.

Un consejo es que te olvides lo máximo posible del móvil, estás con tus amigos, úsalo solo para avisar a tus padres de que estás bien y para hacer alguna foto de postureo para las redes, nada más.

En el recinto del Arenal Sound no solo se vive en euros, también están los tokens, la moneda oficial del festival. Cada token equivale a dos euros, y con él se puede comprar bebida (alcohólica y energética) dentro del recinto tanto de conciertos como el recinto de acampadas. A la hora de comprar la comida no es necesario cambiar a tokens, se cobra en euros.

La playa, solución al calor

Es una gran opción para quitarte el calor. Un punto fuerte del Arenal es que tiene la playa justo enfrente de la zona de conciertos, algo realmente positivo pero también negativo. En apenas 2 minutos llegas a la arena, pero está siempre repleta de gente, suele agobiar bastante y apenas tienes sitio para dejar tus cosas.

Una alternativa que pone a disposición el festival es el Beach Club. Una piscina con música en directo con una cala al lado. Es la mejor opción para disfrutar si no te gustan los conciertos de ese momento. Eso sí, absteneos todos aquellos que os agobiéis, no cabe un alfiler y siempre hay gente organizando bailes que te acaban arrastrando por la fuerza del agua. Si también te da asco el agua sucia esta opción solo es recomendable durante el primer o segundo día. La piscina está en la playa, de manera que la gente la llena de arena en seguida, no verás ni el fondo.

La sombra, un bien muy cotizado

El festival acota las zonas de acampada con toldos negros de plástico. Dan sombra, sí, pero no quitan el calor, nada más lejos de la realidad. Es importante llevarse algún gorro para protegerse del sol en determinados momentos. Llevarte una sombrilla para la zona de acampada no es buena idea.

En principio la organización no permite la entrada de toldos traídos de casa, pero los asistentes se las ingenian para pasarlos. Si quieres coger sombra, tienes que ser de los primeros en llegar, todo el mundo se lanza a por ella como locos. Lo más habitual es hacer cola la noche de antes de que la zona de acampada abra sus puertas, para a las 08:00 horas de la mañana del día 2 coger el mejor sitio.

Seguridad en el camping: la solución contra el mito

En cualquier festival existe la típica persona que cuenta cómo a un amigo de su amigo le robaron las cosas de la tienda. No es algo muy común ni normal en el Arenal Sound, la gente no va rajando tiendas por ahí, pero hay de todo. Lo más seguro es llevar todo lo de más valor (móvil, llaves, dinero y documentación) siempre encima, para ello llévate una riñonera, se va a convertir en una parte más de tu cuerpo durante el festival.

El punto fuerte de los festivales: la convivencia

Sin lugar a duda, lo mejor de cualquier festival es la convivencia. Al Arenal Sound va gente de muchos puntos de España, puedes conocer a gente de otras ciudades y entablar una buena amistad con ellos. Piensa que si repites la experiencia al año siguiente, convivir con ellos de nuevo puede ser una experiencia muy grata. Además, es importante llevarse bien con los vecinos, nunca sabes qué puedes necesitar de ellos.

El buen rollo en el camping es sin duda uno de los puntos más fuertes. Tanto de noche como de día la gente entona cánticos y grita palabras que ya son míticas en todo el festival, algo que te hace sentir como si fueras parte de ello, que te sientas como en casa.