El 17 de julio, hace justo un año que Alba Carrillo vivía uno de los días más felices de su historia, dando el "Sí, quiero" al que pensaba que sería el hombre de su vida, Feliciano López.

Pero Alba ha cambiado lo que debería ser una romántica cena con su recién no marido, por sentarse con Sandra Barneda, Rocío Carrasco, Mónica Martínez y Soledad León de Salazar en ´Hable con ellas´ para terminar de airear los secretos de su polémico divorcio.

Alba jamás imaginó que su vida cambiaría tanto desde hace un año. La modelo se casó enamorada, pero parece que su relación con el tenista jamás fue tan perfecta como aparentaban en redes sociales y es que según han adelantado Alba y su madre en diferentes exclusivas los problemas tanto con Feliciano como con su familia empezaron prácticamente desde el principio de la relación, señalando a la madre de Feliciano como la gran culpable de la situación.

Después de cuatro meses de matrimonio, la pareja se fue de luna de miel a la isla Santa Lucía donde disfrutaron de unas lujosas vacaciones en un exclusivo hotel.

Al volver de las vacaciones la pareja terminó de instalarse en la casa que Feliciano construyó en Majadahonda para los dos y de la que Alba se encargó de la mudanza y decoración creando hasta un espacio infantil para su hijo con Fonsi Nieto. La convivencia era buena, ya que debido a los torneos de Feliciano no coincidían demasiado y realmente Alba estaba enamorada, pero todo empezó a truncarse cuando se publicaron unas fotos de Feliciano con una morena en Miami y se especuló que fuese una posible amante, aunque ambos lo negaron al final Alba ha terminado por darle credibilidad.

Pero esas imágenes solo fueron el detonante de lo que sería el infierno de la Carrillo, tras volver Feliciano de las competiciones empezaron las discusiones y los desplantes que terminaron con una pedida de divorcio fría y distante, mientras supuestamente la amante del tenista estaba en la que había sido la habitación conyugal.

Un año después y con un cambio de vida drástico que jamás esperó, Alba ha cambiado un matrimonio por un programa de televisión y en vez de sentarse a cenar con el hombre que subió al altar lo ha hecho con todos los espectadores deseosos de escuchar el testimonio de mujer sufridora en el que Alba se ha convertido.

A lo largo de la entrevista Alba se emocionó, cada vez que veía a Feliciano en pantalla se le saltaban las lágrimas y se le cortaba la voz, pero finalmente consiguió que la entendiéramos y sintiésemos pena por la modelo con frases ya célebres tan fuertes como las que recogemos a continuación:

"Nunca le cogido el móvil a mi marido", Alba se encargó de desmentir las informaciones de María Patiño que la hacía quedar como una mujer obsesionada.

"Como mujer duele verle con otra a las cinco de la mañana y más cuando a mí no me sacas ni a cenar porque al día siguiente entrenas", y lo entendemos perfectamente. Las fotos de Miami fueron el principio del final.

"Me duele que pongan en duda que nos hemos querido mucho", la verdad que si nos lo dice con esa cara, nos la tenemos que creer.

"Han hablado familiares, amigos que no son amigos, se han dicho muchas mentiras y cosas sacadas fuera de contexto", ¿Quiénes?

"Para mí esto es una traición, ya no sigo enamorada de él porque me ha hecho mucho daño" decía con la voz entrecortada y lágrimas en los ojos.

"Feli ha hablado directamente con medios y ha hablado por boca de su hermano y de más gente", apuntillaba Alba a los que la acusan de hablar demasiado.

"Antes de la boda, le lloré porque su familia controlaba su vida y la nuestra; opinaban de los muebles que se ponían en la casa", hay cosas que puedes soportarle a tu suegra, pero los muebles no.

"A sus padres les he querido muchísimo pero a su hermano no, no me gusta su forma de ser", y parece que el sentimiento es mutuo.

"Él tiene sus inseguridades, sometido a mucha presión porque es un tenista mayor", Estamos seguro que esto es lo peor que le ha sentado a Feliciano de toda la entrevista.

"Con Fonsi he encauzado las cosas, y a Feli es al hombre que más he querido en mi vida", después de unas imágenes en las que se veía una discusión con Fonsi en Ibiza en la que le quitaba una botella de la mano y la tiraba al mar. Alba al mar no.

"Me dicen que soy una cazafamosos, pero son ellos los que me conquistaron a mí" modestia aparte.

"Como madre me siento culpable porque le cambié de vida y me duele que mis errores los pague mi hijo", El momento más emotivo para Alba que ya era un mar de lágrimas llegaba con las imágenes de su hijo Lucas, el hombre de su vida.