Matías Prats lleva más de dos meses de baja por culpa de una afección ocular que le impide trabajar. El periodista, de 63 años, padece una importante degeneración macular, un trastorno que afecta a la visión y le dificulta la lectura.

Matías Prats fue operado el pasado noviembre por un desprendimiento de retina, aunque esta intervención quirúrgica no le ha conseguido devolver la visión que había perdido. Por esa razón, el periodista más carismático de la televisión no ha podido reincorporarse a los informativos de Antena 3 a principios de este enero, tal y como había planeado en un principio.

Los problemas de visión de su familia no son algo nuevo. Mientras que Matías Prats tuvo que ser ya anteriormente intervenido de cataratas, su padre, Matías Prats Cañete, tuvo que llevar siempre gafas de sol a causa de una fotofobia que desarrolló tras recibir un balazo en la guerra civil.