Alejandro Echevarría, presidente de Mediaset España, considera que la vuelta de la publicidad a RTVE sería "un error" que "pondría en riesgo todo el sistema".

Echevarría, en un artículo publicado en el último número del Boletín del Circulo de Empresarios Vascos, afirma al respecto que "la precaria supervivencia de los operadores actuales quedaría completamente comprometida si la declinante partida publicitaria hubiera de repartirse entre más actores".

Estima que en los últimos años el mapa audiovisual español se ha estabilizado, "con dos grandes compañías que compiten entre sí por el liderazgo, una televisión pública estatal que está tratando de encontrar su vocación y su destino como servicio público, unas autonómicas en ruinas que deben ganarse a pulso la sostenibilidad, la televisión por cable y por satélite, y un puñado de pequeñas compañías que pugnan por hacerse un hueco en la TDT y que solo lo encontrarán si optan por la especialización".

Defiende la existencia de las televisiones públicas, siempre que desempeñen "una función pedagógica de difusión cultural y de extensión de los valores éticos del pluralismo" que "no se enmarque en la lucha por la audiencia".

Echevarría critica también el actual modelo de financiación de RTVE y afirma que los operadores de televisión privados "no entendemos bien la razón por la que debemos sufragar una televisión pública que, lejos de centrase en el servicio público al que debería dedicarse vocacionalmente, trata todavía de competir con las emisiones comerciales".

Dada la precariedad del mercado publicitario, sostiene Echevarría, lo "lógico" sería que TVE "se nutriera exclusivamente de los presupuestos del Estado", algo que "tendría un efecto dinamizador sobre todo el sistema audiovisual".

"La misma argumentación puede valer para las televisiones autonómicas, que ahora están pagando con extrema crudeza sus excesos, con un gran coste social para sus víctimas, los trabajadores", advierte.

El presidente de Mediaset España reconoce también en su artículo que en el sector audiovisual hay actualmente un "exceso de oferta, que es hoy muy evidente, pero que persistirá después de la crisis".

Por lo tanto, agrega, "el mercado deberá completar aún el proceso de selección natural para que permanezcan las cadenas que consigan equilibrar sus cuentas con el favor de la audiencia".