España oculta rincones de gran belleza que nada tienen que envidiar a los de otros países. Lejos de las grandes capitales abarrotadas de turistas están las zonas que no son tan comunes para los viajeros pero que son de gran belleza y que muchas de ellas sólo se conocen por el ´boca a boca´.

Si estás pensando en irte de vacaciones a un destino nacional, te presentamos los 10 lugares de España que debes visitar este verano.

1. Volcanes de Timanfaya, Islas Canarias

Conocido oficialmente como el Parque Nacional de Timanfaya, este espectacular paraje se encuentra ubicado en Lanzarote, a lo largo de 51 kilómetros cuadrados. El parque de Timanfaya cuenta con más de 25 volcanes, entre los que destacan las Montañas del Fuego o la Caldera del Corazoncillo.

2. Ronda, Málaga

Las espectaculares vistas desde el abismo de Ronda convierten a esta ciudad malagueña en uno de los lugares más mágicos de España. Ronda, una de las ciudades más antiguas de España, se encuentra en una meseta a 750 metros sobre el nivel del mar, al borde del precipicio que termina en el río Guadalevín.

3. La Albufera, en Valencia

El parque natural de la Albufera puede que sea uno de los rincones mágicos más conocidos de España. Sin embargo, su fauna única y sus espectaculares paisajes hacen de la Albufera un lugar de visita obligada.

El parque natural de la Albufera. GettyImages

4. Sa Calobra, Mallorca

Una de las playas más bonitas de España y también de las de más difícil acceso. La cala de Sa Calobra, ubicada en el municipio de Escorca, está encerrada entre acantilados de más de 200 metros y sólo se puede acceder a ella a través de una sinuosa carretera. La tranquilidad y belleza de esta pequeña playa la convierten en uno de los lugares más mágicos de España.

5. El Puente Romano de Córdoba

Sobre el río Guadalquivir se encuentra este majestuoso puente de más de 2.000 años. Sus 16 arcos y más de 300 metros lo sitúan como uno de los más importantes de España. El Puente Romano de Córdoba ha sufrido varias reconstrucciones a lo largo del tiempo: algunas en la época del califato y otras en la era moderna.

6. Playa de las Catedrales, Lugo

Declarada Monumento Natural, esta playa situada en la Mariña Lucense, en la frontera con Asturias, es una de las más famosas y conocidas de España debido a su extraordinaria belleza. Sus gigantescas y espectaculares formaciones rocosas creadas por el viento y el agua dibujan un sugerente paisaje de enorme belleza. El nombre real es el de playa de Aguas Santas y está situada en la parroquia de A Devesa (Ribadeo). Cuando más se puede disfrutar del paisaje es cuando la marea está baja porque podemos caminar por la arena entre los acantilados.

La playa de Las Catedrales, Monumento Natural. GettyImages

7. El Monasterio de piedra, Zaragoza

Este recóndito lugar fundado en el siglo XIII cerca de la localidad zaragozana de Nuévalos por trece monjes cistercienses alberga en sus alrededores bellos parajes esculpidos por el río Piedra a lo largo de los siglos. Un vergel de cascadas, lagos y grutas confluyen en este bello espacio natural de unos 5 kilómetros cuadrados convertido en un remanso de paz y sosiego.

8. La Alhambra de Granada

No podía faltar en esta lista el monumento más visitado de España. Los palacios, jardines y fortalezas de este lugar nos trasladan a una época pasada en la que los mandatarios nazaríes se paseaban por su interior. Pero si sus salones o patios son espectaculares, los exteriores lo son aún más. Su verdadero atractivo radica en su localización, integrándose por completo en la naturaleza.

La Alhambra de Granada. GettyImages

9. El anfiteatro de Mérida

En Mérida, conocida como Augusta Emerita en la época romana, encontramos este famoso anfiteatro en que lucharon los gladiadores entre los siglos I a. C. y IV d.C. En la actualidad, esas luchas han sido sustituidas por el teatro.

10. Bárdenas Reales, Navarra

Este paraje semidesértico, más característico de las zonas áridas de Estados Unidos, se encuentra en el suroeste de Navarra en unas 42.000 hectáreas. El agua y el viento han erosionado las formaciones rocosas hasta crear barrancos y formas de lo más caprichosas