Semana Santa queda a la vuelta de la esquina, pero la primavera ya está casi aquí, después de un largo invierno. Se nota que los días son más largos, las temperaturas más agradables, y se despierta nuestro interés por una escapada de fin de semana.

Estas son unas fechas apropiadas para hacer planes muy diversos, esos que desde hace meses no nos han permitido el tiempo o, en las fiestas de Navidad, los compromisos familiares.

Repasamos alguinas opciones:

A la nieve

No tenemos que huir del frío necesariamente. Marzo es un buen mes para ir a esquiar. Las estaciones están a pleno rendimiento y ofrecen grandes posibilidades para disfrutar en familia, algo cada vez más sencillo. Pese a las incomodidades propias de una escapada a la nieve, los más pequeños lo agradecerán, sobre todo porque las pistas se han adaptado con espacios para que disfruten tanto en la nieve como fuera de ella.

Sierra Nevada (Granada), Formigal (Huesca), Baqueira Beret (Lleida), Grandvalira (Andorra) o Valgrande Pajares (Asturias), cuentan con zonas para niños, guarderías o servicios especiales, como ludotecas, para que un fin de semana en familia sea mucho más cómodo.

Una esquiadora en la estación de Baqueira Beret, en Girona. Foto: Getty Images

Balnearios

Los balnearios son lugares únicos para relajarnos. Cuando parece que dejamos atrás el invierno, una gran opción es la de descargar las tensiones del trabajo con una visita a un balneario. En España existe un buen puñado de estos establecimientos en los que sus servicios y el entorno nos ayudarán a ello.

Los de Font Vella en Girona, Villa de Olmedo en Valladolid, La Toja y Mondariz en Pontevedra, Las Caldas en Asturias, Puente Viesgo en Cantabria o Archena, en Murcia, son sólo algunos de los más valorados.

Termas en el Balneario de Archena. Foto: balneariodearchena.com

Parques temáticos

Quien prefiera desconectar a base de actividad y entretenimiento puede optar por los parques temáticos. En España destacan sobre todo el Port Aventura en Barcelona y el Parque Warner como centros de atracciones, mientras que el Loro Parque de Tenerife, los Bioparc de Valencia y Fuengirola, en Málaga, o el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, en Cantabria, son los lugares ideales para disfrutar de los animales en familia.

Atracción Superman, en el Parque Warner. Foto: parquewarner.com

Castillos

A quien no le gusten los paisajes artificiales de los parques de atracciones sino las piedras centenarias con los que se han levantado los castillos que se conservan en España tiene un amplio abánico en el que elegir. Podemos repasar, por ejemplo, algunos de los que jalonan el Camino del Cid, que cruza España desde Vivar del Cid, en Burgos, hasta Alicante.

Castillo de Villena, en Alicante. Foto: Getty Images

Si seguimos el sentido de la ruta, en la provincia de Soria destaca la imponente fortaleza califal de Gormaz y los castillos de Langa y Berlanga de Duero, entre otros. En Guadalajara imponen sus figuras los de Atienza, Jadraque, muy bien conservado, o Sigüenza, convertido en Parador de Turismo. En Zaragoza despunta el castillo de Molina de Aragón, mientras que en Teruel merece la pena visitar la fortaleza de Peracense, cerca de Monreal del Campo. Ya en Castellón, llaman la atención los castillos de Onda y Morella. Siguiendo la ruta del Cid, nos encontramos en Valencia con las bellas fortalezas de Sagunto y Xàtiva. En Alicante, última provincia del camino, brillan con luz propia las de Banyeres de Mariola, Biar, Villena o Sax.

Ciudades

Para las familias más urbanitas, los fines de semana también puede ser un buen momento para disfrutar de la ciudad. Redescubrir Madrid o Barcelona, con todas sus posibilidades para pequeños y mayores -museos, monumentos, tiendas, gastronomía, espectáculos- es otra de las grandes opciones para disfrutar al máximo un fin de semana de cuatro días.

Parque Güell, en Barcelona. Foto: Getty Images