Al igual que fotografiar un paisaje o hacer un retrato, hay que cuidar la estética de la comida a la hora de capturar una buena imagen con la cámara. El "foodporn" es mucho más que fotografiar la comida, consiste en hacer atractivo el producto, tanto que apetezca hincarle el diente en cuanto lo tienes delante. Mila Velis, repostera y entendida en "foodporn", bien lo define: "sacar un plato y que la gente desee comérselo".

La foto es casi tan importante como el producto. Una tabla de madera, un par de platos y unas telas, requisitos mínimos para una buena instantánea. También se le pueden añadir detalles como la vajilla de la abuela, jugar con la luz natural, etc.