Bebidas que calman la sed

Expertos de la fundación Alícia, que trabajan para facilitar una alimentación saludable, han elaborado una selección de bebidas tan fáciles de preparar como sabrosas y refrescantes.

La hidratación la proporciona el agua, el principal componente de estas bebidas, a la que se añaden otros compuestos, explica Toni Massanés, director de la fundación.

Zumo de manzana y albahaca

Lavar 5 manzanas granny smith o fuji y cortarlas a cuartos. Pasarlas por la licuadora y guardar el zumo en el congelador en un recipiente alto. Dejar reposar 30 minutos. Sacar del congelador y separar la espuma que ha quedado en la superficie con una cuchara para evitar que el zumo adquiera un color marrón. Añadir 5 o 6 hojas grandes de albahaca al zumo y triturar con un túrmix. Servir muy frío.

Zanahoria on the rocks con jengibre

Pelar 1/2 kilo de zanahorias y pasar por la licuadora. Si se prefiere, se puede colar. Pasar por la misma licuadora un dado de jengibre fresco y añadir al zumo de zanahoria. Llenar seis cubiteras con zumo de zanahoria y jengibre y meter en el congelador. Servir el zumo de zanahoria con los cubitos de hielo de zanahoria y unas gotas de zumo de limón para evitar que se agüe aunque se fundan los cubitos.

Granizado de melón cn piel y caramelos balsámicos

Extraer las semillas de medio melón y cortar las puntas oscuras. Lavar la piel con abundante agua. Cortar a trozos pequeños y licuar. Guardar en el congelador, removiendo cada 15 minutos hasta que adquiera una textura de granizado. Servir con unos caramelos balsámicos previamente rotos a pedacitos por encima. Si el melón no es bastante dulce, se puede añadir un poco de azúcar.

Bloody Mary de tomate y sandía

Lavar el tomate y la sandía con la piel (ambos en la misma proporción) y pasarlos por la licuadora. Aliñar al gusto con pimienta, tabasco, sal y apio. Servir decorado con un trocito de apio tierno o unas hojas de cilantro fresco.