El actor Ernesto Alterio ha participado este viernes en un encuentro digital con preguntas de los lectores. Alterio presenta la película 'Sexo fácil, películas tristes', que compite en la sección oficial del Festival de Málaga. Junto a él protagonizan esta comedia Quim Gutiérrez y Marta Etura. 'Sexo fácil, películas tristes'Quim Gutiérrez y Marta EturaConsulta aquí el encuentro íntegro.

"Interpreto a un escritor en crisis creativa y personal y al que le encargan escribir el guión de una comedia romántica, algo que le resulta frívolo, pero que después le posibilita destrabar su relación personal", dice sobre su papel en la cinta.

De cara al futuro, el actor hispano-argentino se muestra abierto a nuevas propuestas. "No tengo un género favorito, todas las propuestas me interesan. He hecho todo tipo de películas, pero quizás me quede por hacer alguna de terror, y me gustaría".

Sobre una hipotética carrera como director, Alterio no la descarta. "Antes tenía más ese deseo, ahora se me ha pasado un poco, puede ser debido a que he empezado a pintar hace unos años y ha cubierto una necesidad de crear algo propio. Es también un trabajo solitario, que me gusta. Aquí soy más dueño de mi tiempo y de lo que genero".

Hijo del actor Héctor Alterio y hermano de Malena, Ernesto estudió Arte Dramático con Cristina Rota y Daniel Sánchez y debutó en el cine con 'Tanguito', del argentino Marcelo Piñeyro.

Entre sus trabajos destacan 'Los años bárbaros', 'Los lobos de Washington', 'El otro lado de la cama' o 'Días de fútbol', por la que fue candidato al Goya al mejor actor.

Una historia de amor

'Sexo fácil, películas tristes' está escrita y dirigida por el argentino Alejo Flah. Se trata de una comedia romántica que construye puentes entre la dura realidad y la ficción idealizada, y que muestra el cine que trata de compensar aquello que no sucede en la vida cotidiana y que sirve de revancha al espectador.

Marina (Marta Etura) y Víctor (Quim Gutiérrez) tienen todos los ingredientes para vivir una hermosa historia de amor y se dan cuenta de que están hechos el uno para el otro, pero el problema es que en realidad son personajes de ficción creados por Pablo (Ernesto Alterio), un guionista que no pasa por su mejor momento personal.

"Todos tuvimos la sensación yendo al cine de por qué nuestra vida no es como las películas o por qué nuestras historias de amor no son como las comedias románticas", asegura Alejo Flah, que admite que el film tiene una parte autobiográfica.