Todo empieza un día normal y corriente, pero es el comienzo de una pesadilla que va a engendrar una nueva guerra mundial y poner en peligro el futuro de la humanidad. Gerry Lane y su familia ven interrumpido su tranquilo trayecto en coche por un atasco de tráfico. Como antiguo investigador de Naciones Unidas, Lane se da cuenta de que no es un atasco de tráfico normal. Mientras los helicópteros de la policía rondan por los aires y policías en moto derrapan salvajemente por los suelos, la ciudad se va sumiendo en el caos.

Este es el inquietante prólogo de una cinta nacida con vocación de impactar en el auditorio y romper records de taquilla que viene avalada por Brad Pitt en su doble tarea de actor y productor. En su papel de Lane se siente desconcertado al comprobar que algo está haciendo que multitud de personas se ataquen salvajemente entre sí: un virus letal que se transmite mediante un simple mordisco, convirtiendo a seres humanos sanos en algo irreconocible, inconsciente y feroz. El vecino se vuelve contra el vecino, un solícito desconocido de repente se convierte en un peligroso enemigo.

Se desconoce el origen del virus, y el número de afectados aumenta de manera exponencial cada día, convirtiéndose rápidamente en una pandemia mundial. A medida que los infectados desbordan a los ejércitos del mundo y hacen caer rápidamente a sus gobiernos, Lane se ve obligado a volver a su antigua y peligrosa vida para garantizar la seguridad de su familia, poniéndose al frente de una búsqueda desesperada por todo el mundo de la fuente de la epidemia y de algún medio para detener su incesante avance.

La cinta comenzó siendo una novela de terror post-apocalíptico de Max Brooks llamada 'World War Z: An Oral History of the Zombie War', una serie de relatos individuales y en primera persona de aquellos que lo vivieron. Los productores Brad Pitt, Dede Gardner y Jeremy Kleiner leyeron el libro en formato de galeradas. Ellos, y todos los demás miembros de su productora, Plan B Entertainment, quedaron cautivados.

"Hace cinco años -comentó Pitt-, no sabía nada de los zombis. Ahora, me considero un experto. El libro de Max aborda el género de zombis como si fuera una epidemia mundial, propagándose de manera muy parecida a como hemos visto hacerlo a otros virus como el SARS. ¿Qué pasa cuando fallan los cortafuegos... qué pasa cuando todas nuestras preocupaciones cotidianas se vuelven inútiles?".