El Mercado Central de Valencia, uno de los edificios más emblemáticos y turísticos de la ciudad, conmemora el centenario de su gestación con una exposición repleta de vidrieras, cúpulas y azulejos originales que bucean tanto en su arquitectura modernista como en el universo de sus vendedores.
Colgadas sobre las paredes del centro cultural "La Llotgeta", anexo al Mercado, una selección de imágenes y paneles revive un viaje arquitectónico y una cronología que, desde momentos anteriores a la existencia de la construcción, refleja la configuración de los vendedores y sus oficios.
La exposición ofrece una muestra urbanística del Mercado Central, presenta sus detalles más importantes y desarrolla una explicación de la restauración de cada uno de ellos, completada con muestras originales del edificio, según explica a EFE el comisario de la muestra, Francisco Hidalgo.
En una primera planta se evidencia el protagonismo del hierro laminado, la geometría y la jerarquización de sus espacios interiores, desde que se inicia la construcción del Mercado en 1914 hasta que finaliza en 1928.
Esa zona alberga una maqueta recortable del Mercado que, hecha por primera vez para la exposición, enlaza con la intención didáctica de la muestra, que pretende atraer a centros escolares para que "den color a su mercado".
El gerente del Mercado Central, Roberto Doménech, señala a EFE que se han creado dos modelos de maqueta; una primera edición para personas ya introducidas en el mundo del modelismo y otra más sencilla que, dedicada a un público escolar, da a conocer el mercado por medio de manualidades de recorte y pintura.
Desde el mercado se ha remitido una carta a todos los colegios e institutos de la provincia de Valencia para que se acerquen a "La Llotgeta" y se lleven la maqueta como un trabajo de aula que aporte cultura sobre uno de los edificios más emblemáticos del modernismo valenciano.
En esa misma línea, incluso una escena de la serie televisiva "Cañas y Barro", basada en una obra de Vicente Blasco Ibáñez, ayuda a explicar de una forma más didáctica los cien años de historia de la configuración de la plaza y del propio mercado en un audiovisual producido por la Asociación de Vendedores.
Innumerables fotografías, que decoran la segunda planta del edificio, dejan ver en blanco y negro los antiguos comercios que se distribuían alrededor del Mercado para contrastar con el color que desprende la luz y la policromía tras su restauración.
En un recorrido resumido por tiempos, que se inicia con grabados y planos de la plaza desierta y el posterior "Mercado Nuevo", se plasma la ambientación de puestos exteriores previos al edificio y fotografías anecdóticas que muestran las fallas que se montaban en torno al mercado en los años 40.
Los carteles publicitarios modernistas de la época, como el anunciador del musical estrenado en Valencia "La cotorra del mercat", también colaboran en la inmersión histórica y cultural que culmina en la obra final que hoy se conoce.
Ante el interés que ha suscitado la exposición, que amplía la muestra ya realizada anteriormente en el Museo de Historia de Valencia y se expondrá hasta el próximo 30 de diciembre, se plantea ahora la creación de un catálogo que complete la exposición y deje constancia y conocimiento de la muestra.
